Día 18 de julio, quinta y última etapa. Partimos de Silleda dirección Bandeira y por caminos secundarios y algún sendero llegamos a Dornelas, para continuar por San Miguel de Castro y más tarde a nuestra para habitual para desayunar en Ponte Ulla, que recibe su nombre del río que pasa a su vera, rio Ulla. Todos estos caminos como es habitual aquí, están llenos de subidas y bajadas, pero comparado con la jornada anterior es mucho más rodadora. El recorrido en general nos resulta muy bonito con sus verdes paisajes y atravesamos algún que otro arroyo y varias hermitas a pie de camino. Continuamos por Outeiro, Lestedo y algún pueblecito más para llegar a Piñeiro, el último pueblo que atravesamos antes de llegar a nuestro ansiado destino, Santiago de Compostela, donde como no podía ser de otra forma, llegamos subiendo otra cuesta más, aunque esta realmente nos sabe a gloria. Etapa más leve que las anteriores, 43 km con un poco más de 800 m de desnivel.
|